Fernando Castro Borges
La naturaleza crea una infinidad de ecosistemas; la Península de Yucatán, ha evolucionado a lo largo del tiempo, su biodiversidad se ha adecuado durante la evolución del planeta. En ella encontramos una riqueza, en esta hábitat, tan variado; donde conviven selva y mar; lagunas, grutas y cenotes, así como una muy variada flora y fauna.
En este muy variado ecosistema que existe en la región, hallamos un lugar en Municipio de José María Morelos; Quintana Roo; que la Naturaleza ha reservado solo para los más intrépidos; para aquellos que vivir es una aventura. Este lugar tan especial es la Caverna de Kantemó, o mejor conocida como la Cueva de las Serpientes Colgantes, la cual es una gruta enclavada en medio de la selva, donde la adrenalina te acompaña a cada paso.
Las condiciones son únicas; de acuerdo con el estudio “Proyecto Kantemó”, publicado en el boletín bimestral “Bio DIVERSIDAD “; de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad; en su número 73; se afirma que:
“Los restos fósiles encontrados muestran que en el pasado este lugar fue parte del lecho marino, cuya firma en la roca a través de diversos restos petrificados certifica la abundancia de la vida acuática en aquellos tiempos”
Los investigadores Julissa Sánchez Chávez y Arturo Bayona Miramontes, autores de este estudio, aseveran que esta cueva tiene un bóveda alrededor de 60 metros, por lo misma medida de largo; en donde su altura es variada; encontrándose la parte más profunda de 20 metros.
Dentro de la caverna de Kantemó, se encuentran cenotes y ríos subterráneos; recordemos que esta zona estaba sumergida en el mar; por lo que existe una extensa fauna marina, donde conviven y desplegando la cadena alimenticia, con la particularidad de que todos son ciegos.
La experiencia inicia en el justo momento en el que el Sol se oculta, el día se extingue y la noche empezará a reinar el escenario selvático. Es el momento donde miles de murciélagos escapan de la caverna para apropiarse de la próxima oscuridad; algunos calculan que aproximadamente doscientos murciélagos salen por segundo., un espectáculo gótico que todos los días regala la naturaleza.
Ser testigo de esta escapatoria de una colonia gigantesca de murciélagos, es un momento único. Sin embargo; justo al caer la noche, inicia un espectáculo inolvidable, donde el espectador debe de probar su valentía; ya que harán su aparición, aprovechando la salida de los mamíferos voladores, desde las miles de guaridas que conforman la bóveda de esta singular gruta, un sinnúmero de serpientes ratoneras, que se aferran de la cola en las hendiduras, para poder capturar al vuelo a sus presas, haciendo de esta alucinante danza aérea, un tiempo donde el ambiente es asfixiante, envuelto de depredadores, chasquidos, de olor a guano y crujidos de huesos; donde los sentidos se pondrán a prueba.
Esta enigmática caverna, se encuentra a 222 kms. De la capital del estado de Quintana Roo; aproximadamente a tres horas de Chetumal; en donde esta comunidad, organizan visitas; se recomienda llevar ropa gruesa, aunque lo más importante es cargar en la mochila el valor para vivir la aventura en la Cueva de las Serpientes Colgantes.
Commenti