El potencial de Sinaloa para la producción de energías verdes se ve reforzado con la inversión de 2 mil 200 millones de dólares en la planta de metanol en Topolobampo, señaló Luis Armando Becerra Pérez, especialista en desarrollo económico y energías sustentables de la Universidad Autónoma de Sinaloa.
Becerra Pérez resaltó que la planta de metanol representa una oportunidad tecnológica y ambiental significativa para Sinaloa, siempre y cuando el Gobierno y las universidades colaboren en la formación de ingenieros y técnicos necesarios para su funcionamiento.
Destacó que la planta de metanol en Topolobampo no solo es una inversión masiva, sino que también es una industria no contaminante que puede impulsar el desarrollo de otras industrias relacionadas. Además, puede convertir a Topolobampo en un centro neurálgico para el desarrollo de hidrógeno, una energía clave para el futuro.
Según los datos proporcionados por la Secretaría de Economía, la planta Mexinol generará 3,000 empleos durante su fase de construcción y 400 empleos permanentes una vez que esté en funcionamiento. Se espera que tenga la capacidad de producir un millón 800 mil toneladas de metanol azul y 300 mil toneladas de metanol verde al año, lo que representa más de 2 millones de toneladas de metanol anualmente. La obra estará en operaciones en el 2027.
Becerra Pérez resaltó la relevancia de esta inversión, equiparándola a aproximadamente el 25% de la inversión total de Tesla, lo que la convierte en un proyecto de gran importancia a nivel nacional.
Además, señaló que Sinaloa también tiene la capacidad de producir aproximadamente el 20% del etanol requerido en el mercado nacional a partir de los rastrojos de maíz.
Lo más destacado de la planta Mexinol, según el especialista, es su proceso ambientalmente amigable que utiliza aguas residuales de la ciudad de Los Mochis y energía eléctrica, posiblemente obtenida a partir de fuentes solares, para producir hidrógeno, el principal componente del metanol.
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