Una confusión sin arte no resuelve la inseguridad.
Con alivio se desparrama la tarde y el olvido se desvanece Fragmento del poema La Confusión, de Pilar Luna
De pronto, platicando con algunos amigos del sector nacional de la Cultura –como César Octavio Larrañaga-, la Cultura Impar buscó proponer una estrategia integral para el sexenio de Claudia Sheinbaum -en el plano ideal- para que se le dé el papel que merece.
Habría de considerar varios aspectos clave: la diversidad cultural, la inclusión social, la innovación, la preservación del patrimonio y la promoción de la cultura como motor de desarrollo social y económico.
La diversidad e Inclusión Cultural, para fomentar y celebrar la diversidad del México moderno, y promover la inclusión de todos. Esto, se puede lograr con programas que apoyen y promuevan las culturas indígenas, afrodescendientes y otras minorías. Claro, incluirá fondos para proyectos, festivales y ferias.
Debe buscar establecer o fortalecer centros culturales en comunidades rurales y urbanas marginadas para proporcionar espacios donde se desarrollen todo tipo de actividades sectoriales.
Incorporar la educación intercultural en el currículo escolar, promoviendo el respeto y la valorización de la diversidad cultural desde una edad temprana. ¿Se atreverían?
La Innovación y Tecnología en la Cultura son vitales ya para difundir y preservar, así como para fomentar la creatividad e innovación en las artes.
Crear una plataforma digital que permita el acceso a museos, bibliotecas y archivos históricos a través de tours virtuales y recursos educativos.
Ofrecer incentivos y apoyo financiero para emprendedores en las industrias creativas, como cine, música, diseño y artes visuales.
Establecer laboratorios en colaboración con universidades y centros de investigación para explorar nuevas formas de expresión artística y cultural utilizando tecnología avanzada.
La Preservación y Promoción del Patrimonio Cultural para proteger y promover el patrimonio cultural tangible e intangible de México. La restauración y conservación con recursos suficientes para sitios históricos, monumentos y obras de arte, con un enfoque en la participación comunitaria.
Nada difícil debe ser ampliar y fomentar la promoción del patrimonio cultural en el extranjero a través de exposiciones, festivales y programas de intercambio cultural. Fortalecer programas que apoyen la transmisión de tradiciones y costumbres locales, incluyendo festividades, danzas y gastronomía.
Utilizar la Cultura como Motor de Desarrollo Social y Económico es una herramienta para el desarrollo social y económico sostenible.
Desarrollar rutas y circuitos turísticos culturales que involucren a las comunidades locales, generando empleo y promoviendo el desarrollo regional.
Facilitar la creación de pequeñas y medianas empresas culturales a través de formación, financiamiento y acceso a mercados.
Ya que a la 4t le gusta el tema del Bienestar Social, implementar programas culturales en áreas urbanas y rurales que sirvan para mejorar la calidad de vida, promover la cohesión social y reducir la violencia. Fomentar la participación ciudadana en la gestión y toma de decisiones culturales.
Establecer consejos culturales en cada estado y municipio que incluyan representantes de diferentes sectores de la sociedad, incluyendo artistas, académicos, empresarios y organizaciones comunitarias.
Claro, con sus para el diseño y evaluación de políticas culturales, asegurando que las voces de todos los grupos sociales sean escuchadas.
Implementar mecanismos de transparencia y rendición de cuentas en la gestión de recursos y programas culturales.
Solo por eso, la propuesta integral para la cultura en el sexenio de Claudia Sheinbaum debe buscar el fomento a la diversidad, la inclusión, la innovación, la preservación del patrimonio y el desarrollo social y económico a través de la cultura. Se puede construir una política cultural robusta y sostenible que beneficie a todos los ciudadanos y promueva el crecimiento y la cohesión social en México.
El problema será que les interese y se atrevan.
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